domingo, 23 de mayo de 2010

En las tinieblas la imaginación trabaja más activamente que en plena luz.

Empiezo con una frase de Immanuel Kant, y me explico.


No estoy seguro de si la imaginación es solo potestad exclusiva del ser humano. Lo que sí creo es que, junto con la inteligencia, la habilidad para manipular objetos y alguna otra, es uno de los pilares del “progreso” de nuestra especie. Imaginamos soluciones a los problemas en todos los ámbitos de la vida y, las que resultan exitosas, van poniendo un ladrillo más en la construcción de nuestro avance.

Es por lo tanto una facultad aparentemente positiva. Relacionamos imaginación con creatividad, ensoñación, fantasía, etc., y en realidad es neutra, ni buena, ni mala, como en otras muchas cuestiones, todo depende del uso que hagamos de ella. Alguien con un odio visceral a otras razas o creencias, imaginó como deshacerse de ellas y creó los campos de exterminio. Otro, sin embargo, ante el dolor, la pobreza y la falta de posibilidades de los más inocentes y desamparados, los niños, fundó “Mensajeros de la Paz” después de imaginar cómo podía ayudarlos. Dos filos de una misma daga.

La imaginación podemos ponerla a trabajar voluntariamente con algún fin, positivo o negativo como dije antes, sin embargo, a veces, salta sola, de repente, alimentada por la memoria tal vez. Aparecen en nuestra cabeza “películas” que nos inventamos sin darnos cuenta, que en muchos casos ni siquiera tienen fundamento o, aun teniéndolo, no se aproximan a la realidad, pero que, muy a nuestro pesar, somos incapaces de quitárnoslas de encima y nos reconcomen el alma. Suerte, en mi caso, que el tiempo va cubriendo de ungüentos medicinales esos mordiscos profundos y, al final, tan solo quedan cicatrices más o menos perceptibles.

Esta noche mi imaginación me trajo un enorme escorpión negro que aguijoneaba sin piedad lo más profundo de mi espíritu. Abrió en él una brecha llena de ponzoña. Hoy la herida ya casi no sangra, solo en algún momento cuando presiono sobre ella intentando eliminar todo resto purulento. Mañana empezará a aparecer la postilla sobre la llaga. Tal vez pasado sea ya una cicatriz fresca que, junto con las demás, irá dibujando la esencia de mi vida.

No sé si Kant era a esto a lo que se refería.

P.D. Ya tomé una decisión con respecto al post anterior. Es la misma ya un hecho consumado. Nada impide a la vista vislumbrar la piel de mis piernas, ni siquiera un pelo.

Tuve en consideración todos vuestros buenos consejos pero al final hice caso a Rubi. La veteranía, bien llevada eso sí, es un grado, es cierto.


3 comentarios:

Roberto dijo...

Recuerda, el Xabalí pata peluda. El gochu astur celta pata "limpia".
Pero el Xabalí como la cabra tira al monte.
¿habia una canción de la cabra, o es cosa mi imaginación?.

Saludos

CIMAFERMIN dijo...

Sabia decisión y sutíl comentario sobre la edad de Rubi,pero ya sabes que sabe mas el diablu por vieyu que por diablu.

Jose Luis dijo...

Me quedo con el título, es cierto. Fdo: Insomne.